2012 Contra la educación bulímica

MARÍA ACASO PROFESORA DE EDUCACIÓN ARTÍSTICA

"Hay que acabar con la educación bulímica en la que te atiborras de datos, los vomitas en el examen y te olvidas"

Dice que en el arte es un error ir a entenderlo todo, y que hay miedo al complejo de inferioridad, a reconocer que necesitamos aprender a mirar el mundo de otra manera. Y lo necesitamos. Eso sí, aprender activamente, no sentarnos a esperar que nos enseñen, defiende María Acaso

PAULA ECHEVERRÍA - Miércoles, 13 de Junio de 2012 - Actualizado a las 05:09h.

PAMPLONA. Después de siglos y siglos con el arte por encima del individuo y no a su lado, ¿cómo se logra el acercamiento entre ambos?

Con una educación artística comprometida, con cambios de formato, innovadora. Es la que hace que por fin el visitante entienda que analizar una obra de arte no es averiguar qué quiso decir el autor, sino construir su propio relato sobre la obra.

¿Quedan en España muchos museos de esos ante los cuales nos sentimos ignorantes sin remedio?

Por desgracia sí. El cambio se da más en los de arte contemporáneo, pero en los que son de artes visuales tradicionales todavía cuesta mucho llevar a cabo estrategias diferentes.

Hemos llegado a esta crisis de valores por la cultura del competir y parece que nos empujan a salir de esta compitiendo aún más...

Claro, ahí vuelvo a la educación. Si la escuela en vez de fomentar el competir fomentase el compartir, como adultos en las empresas también sentiríamos que eso es lo importante.

¿No es difícil dar hoy una educación de calidad con tantos recortes?

No tiene que ver con lo económico, sino con el cambio de paradigma. En la formación del profesorado tiene que empezar a haber diferentes clases y metodologías, hay que atreverse a hacer cosas nuevas, porque lo que hay no sirve. En la escuela tradicional no se aprende, se da una educación que yo llamo bulímica: te atiborras de datos, los vomitas en el examen, y al día siguiente te olvidas.

He leído en su blog una frase que me ha gustado: "Educar es dar lo que no se tiene". ¿El primero que aprende y descubre cosas es el educador?

Efectivamente. Esa frase es de Elizabeth Ellsworth, que es mi pedagoga de cabecera, y representa la idea de que el conocimiento está en todos nosotros, entonces un buen profesor lo que hace es darte la capacidad para que tú lo descubras y lo pongas en funcionamiento, más que embutírtelo como si fuera un chorizo...

¿Cómo debería ser la educación artística contemporánea?

Tiene que focalizarse en el análisis y la reflexión, que es lo que la une directamente al arte contemporáneo, y no tanto en las técnicas y en la producción, que es en lo que se ha centrado tradicionalmente.

Después de haber trabajado en muy diversos países, ¿cómo ve España en lo que respecta a su profesión?

Pues veo que el problema es que seguimos con una tasa muy alta de fracaso escolar porque España es bastante tradicional con respecto a la escuela, nos cuesta mucho innovar. Y también por la apreciación social del trabajo profesoral. Cuando se habla de que Finlandia tiene muy buenos resultados, es porque los profesores finlandeses están súper bien pagados y súper bien reconocidos socialmente, y esto no ocurre en España, donde hay una gran feminización del colectivo docente, que cobra mucho menos de lo que debería de cobrar.

¿Qué asignaturas quitaría y cuáles pondría en su lugar en el sistema educativo?

Quitaría el concepto asignatura. Sobre todo la asignatura estanca, encajonada. Hay que crear redes de conocimiento que se puedan utilizar en diferentes momentos. Quitaría también las estructuras cerradas de las clases con las puertas y crearía espacios amplios... Hay que darle un giro del 100% al sistema educativo.

¿Lo ve posible?

Yo creo que somos cada vez más los profesores que queremos ese cambio, y que se llevará a cabo.