Pedagogías Invisibles somos un grupo autogestionado de investigación en educación artística. La mayoría de nuestras investigaciones acabarán teniendo un formato académico por lo que redactaremos, imprimiremos y defenderemos una tesis doctoral. Pero esa parte es de todo el proceso la que menos nos interesa porque lo que realmente defendemos es que la investigación en educación artística es un proceso continuo e inconcluso que ocurre en cualquier momento y en cualquier lugar. Para debatir sobre el estado de nuestras investigaciones nos reunimos de manera frecuente y ayer lo hicimos en el espacio que inauguraba una de nuestras miembras, Julia Rico que abría al público su taller Habitar la línea.
Las invisibles fuimos
llegando y nos sentamos en un círculo en el suelo. Cuando llegué yo, distribuí
a cada uno de los presentes un botecito para introducir alguno de nuestros
fluidos corporales de manera que poco a poco en el centro de ese círculo se
formó una composición variable de botes con contenidos de diferentes colores. Esto
ha ocurrido porque hemos decidido dar
un formato artístico a cada una de nuestras reuniones de investigación ya
que no puede haber cambio de contenidos
sin el pertinente cambio de arquitectura fundiendo lo pedagógico con lo artístico y lo artístico con lo investigador. Para
hacer una metáfora de todo esto, quisimos apropiarnos de la contundencia de la
obra de Andrés Serrano “Pis Christ”
con la que en 1987 denunció la marginación de los enfermos de SIDA.
Al día siguiente (es decir
hoy) hemos ido Sol, Paz, María, Nono, Martín, Olivia, Monsieur Voyage, María
Jaque y yo a realizar un taller en el CA2M
con la artista Tamara Arroyo.
Nada más llagar Tamara y Vito nos han pedido que hiciésemos una puerta que ha
servido de presentación. Nos han ofrecido para hacer la puerta un material
increíble: una especie de celo de colores muy fácil de pegar y de quitar. Tras
explicar cada uno de nosotros para qué servían nuestras puertas (puertas de
gigantes, de dinosaurios, para cerdos, para suicidas….) nos hemos dividido en
dos grupos y en dos espacios separados y
hemos hecho: LA CASA DE LOS FANTASMAS
y el MUSEO MIS-M.
La Casa de los Fantasmas es una obra creada por las artistas Paz Muñoz-Baroja y Olivia Perea en la que,
tras la unión de diferentes soportes efímeros, se ha creado una especie de
jaima habitada por zombis, esqueletos y otras criaturas de ultratumba. Lo mas
interesante de la jaima ha sido el “Armario de los fantasmas” donde quedaban
atrapados cada uno de los invitados. El Museo
MIS-M (Museo Interactivo y Social de Materiales) es una pieza que albergaba
a su vez cuatro subpiezas: María Torrado
presentaba dos Maniquiésconlosbrazosabiertos; Martín Perea nos ha dejado boquiabiertos con su Súper Bomba; Sol Muñoz-Baroja había dispuesto en el
suelo a Paca, una muñeca hecha con los restos del taller anterior mientras que Nono Torrado hacía una versión de la
obra “Una y tres sillas” del artista Joseph Kosuth. Tuiteada como un TIF, esta
experiencia ha puesto de relieve una vez más que los únicos que no tienen
prejuicios ante el arte actual son las personas de menos de 15 años además de
que la creatividad es solo una cuestión de práctica.
Esta semana han sido siete días dedicados a la investigación,
dedicados desde proyectos financiados (Esto No es Una Clase), reuniones jocosas
(Pedagogías Invisibles) y momentos en familia (CA2M) a reflexionar sobre qué es
y qué debería de ser la educación artística hoy. Porque tanto desde la
universidad, como desde los centros de arte, como desde el salón de una casa, cambiar el paradigma necesita de la investigación, así como la investigación necesita del cambio de paradigma….
1 comentarios:
¡¡¡Estos peques tienen mucho arte!!! Feliz Navidad y por fa no líes un TIF en la cena de nochebuena con la familia que te conocemos...Besitos.
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